Anhelamos ser libres de máscaras, pero nos da miedo o pereza caer en el precipicio de vivir sin ellas...
Si os encontráis de repente junto al precipicio, os daréis cuenta de que ahí termina el tortuoso camino de vivir con cadenas y máscaras pesadas, ya es un logro llegar hasta Él.
Acepta que tu camino se ha acabado y tiráte, aprenderás a volar...
Porque no hay nada tan bello como aceptar, confiar y vivir por ti mismo.
Pero alerta, no te confíes porque ellas aparecen, no quieren dejar de ser... solo tú podrás reducirlas a un recuerdo pasado.
Os deseo buena fortuna!!
No hay comentarios:
Publicar un comentario